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| Obras de Ramón Casas Foto: Dolores García, con iluminación ambiente sin flash |
La colección que Santiago Rusiñol ealitzó de las obres de algunos de sus compañeros y amigos, como Ramon Casas, Ramon Pichot, Ignacio Zuloaga, Miquel Utrillo, Carles Casagemas, Guillem Ferrer, Dario de Regoyos, Lluïsa Denis de Rusiñol, o Pere Ferran Icart entre muchos otros es la base de esta exposición, que también incluye obras de Santiago Rusiñol.
La exposición se inauguró el pasado viernes con una gran afluencia de público que no se quería perder la oportunidad de gozar siendo los primero en ver desde una perspectiva diferente estas obras que antes se encontraban expuestas en el Cau Ferrat (hoy en restauración).
El acto inaugural corrió a cargo de Vinyet Panyella Directora Gerente del Consorci del Patrimoni de Sitges. (enllaç al seu discurs inaugural en català) (al pié está la traducción en castellano)
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| Gitana de Albaicin de Santiago Rusiñol Foto: Dolores García, con iluminación ambiente sin flash. |
El Cau Ferrat fue la residencia de Santiago Rusiñol en Sitges, una residencia temporal, que se convirtió en el testimonio físico de su relación con la población, ya que el pintor la dono a la villa, junto con las colecciones que contenía.
La exposición estará abierta hasta el 25 de noviembre.
Horario:
Hasta el 30 de junio:
De martes a sábado de 10 a 14 y de 15,30 a 19 horas
Domingos y festivos de 11 a 15 horas
De 1 de julio a 30 de setiembre
Martes a Domingos, también festivos; de 11 a 20 horas
De 1 de octubre a 25 de noviembre
De martes a sábado de 10 a 14 y de 15,30 a 19 horas
Domingos y festivos de 11 a 15 horas
Traducción al castellano del discurso inaugural de Vinyet Panyella:
Discurso inaugural de la exposición EL ARTE MODERNO. OBRAS MAESTRAS DEL CAU FERRAT
Es una vez mas “que el Cau Ferrat se reúne cerca del mar…que huyendo del ruido de la ciudad venimos a soñar al pie de esta hermosa playa, a sentir nos arrullados por el compás de las olas, a tomar las aguas de la poesía (…) venimos aquí (…) a protegernos bajo la bandera del arte”. Permítanme que proclame una vez más el discurso de Santiago Rusiñol de la Tercera Fiesta Modernista, en este momento inaugural de la exposición El Arte Moderno. Obras Maestras del Cau Ferrat.
Hoy que trabajamos porque el Cau Ferrat, el más genuino y auténtico Museo del Modernismo, se convierta en un museo del siglo XXI sin perder ni un ápice de su carácter artístico único, obra de arte de acoge la colección de colecciones artísticas, auténtico compendio de la modernidad tanto por lo que hace al arte antiguo como por lo que corresponde al arte moderno que vio nacer y propagó, abrimos las puertas de esta exposición porque no queremos que por más tiempo el Cau Ferrat sea un museo de colecciones cerradas.
Las razones que nos han llevado a emprender la organización y producción de la muestra son las de dar respuesta a la demanda social, cultural, artística y turística, así como la voluntad de hacer accesibles las obras maestras que marcaron la hora y la época de la modernidad del Cau Ferrat en el contexto de unos años convulsos y difíciles en los cuales Santiago Rusiñol enarboló la bandera de la regeneración por la vía del arte.
El Cau Ferrat está ahora cerrado por obras pero es un museo vivo y vivas están sus colecciones que aloja. La cuidadosa selección de las ciento cincuenta obras que configuran El Arte Moderno. Obras Maestras del Cau Ferrat obedece a la voluntad de muestra una contemplación y lectura diferente y singularizada de la parte más emblemática de las colecciones rusiñolianas con la voluntad de hacerla accesible y de acercarla a todo tipo de públicos. La tecnología de la información que hemos aplicado, muestra y preludio de la que aplicaremos al Cau Ferrat, nos apunta una de las posibilidades del proyecto museográfico del futuro Cau Ferrat: una joya de la modernidad del siglo XIX plenamente viva y vigente en el siglo XXI.
El planteamiento de esta muestra que hemos titulado El Arte Moderno. Obras Maestras del Cau Ferrat es a la misma vez la de dar respuesta a las demandas actuales de acceso y los ensayos de prefiguración del que será el Cau cuando reabra sus puertas. La introducción a la personalidad de Rusiñol, la consideración del coleccionismo como una manifestación de la modernidad artística de la época en que el artista con voluntad enciclopédica, atesoraba las muestras del arte antiguo y después moderno para su revalorización y ejemplificación estética y a la generosidad con la Villa de Sitges, por el amor que le profesaba, de dejarle en legado la gran obra de su vida son activos que debemos evocar, hemos de valorar y hemos de proyectar hacía el futuro. Tenemos el deber moral y cívico, y esta es nuestra misión.
Desde el Consorci del Patrimoni de Sitges, organismo formado por la Diputación de Barcelona y el Ayuntamiento de Sitges con la finalidad de velar y potenciar nuestros museos, queremos dejar constancia de nuestro compromiso con las artes, con Rusiñól y con el legado que nos dejó, en reconocimiento de los valores artísticos y patrimoniales que en el presente encarna y proyectarlos hacía el futuro en las diversas vertientes de las tareas de los museos de Sitges.
Quiero agradecer al MNAC su colaboración, en tanto que el Cau Ferra tés una sección, sin la cual esta muestra no habría sido posible. Agradezco al comisario de la exposición, el historiador de arte y experto en historia del coleccionismo Ignasi Domènech, su trabajo riguroso y constante, y al personal del Consorci del Patrimoni de Sitges el trabajo que llevan a cabo, y, especialmente a las personas que en los últimos diez días se han volcado literalmente en cuerpo y alma a dar forma definitiva a esta muestra.
El hecho que el presidente de la Diputación, el Alcalde de Sitges y las autoridades que nos acompañan hayan querido estar presentes en esta inauguración no es meramente protocolaria, sino que se trata de una muestra de hasta qué punto comparten la creencia de la importancia de las artes y de la cultura y de sus valores, especialmente en tiempos de crisis. Desde los museos de Sitges estamos seguros que contamos con el soporte material e inmaterial por medio del Consorci del Patrimoni de Sitges en tanto órgano de gobierno y de gestión.
Para concluir mi parte del discurso inaugural, quisiera dirigirme explícitamente a Santiago Rusiñol por medio de su biznieto, Norman Cinnamond. Tu sabes que los que somos y sentimos Sitges estamos aún en deuda con tu abuelo, y que, si hablamos en términos materiales, nunca haremos suficiente para agradecerle que nos situara en primera línea de la modernidad, que nos pusiera en el mapa de la cultura europea y universal de su tiempo y del nuestro y que nos legará su Cau Ferrat con todo el sistema de valores que ello implica. Pero lo que si te puedo asegurar es que ponemos todos nuestros medios, tangibles e intangibles, para situar el Cau Ferrat en la primera línea de los museos únicos del mundo, para corresponder a la generosidad de un artista que creía en un principio que compartimos: que el arte es regeneración, luz verdadera, algo que nos hacer gozar y sufrir y poesía para la vida. Un sistema de valores en el que creemos y que no tiene fecha de caducidad, y es por eso que en pleno siglo XXI mantiene su plena vigencia.
Vinyet Panyella
Directora – Gerente del Consorci del Patrimoni de Sitges.
Traducción al castellano del discurso inaugural de Vinyet Panyella:
Discurso inaugural de la exposición EL ARTE MODERNO. OBRAS MAESTRAS DEL CAU FERRAT
Es una vez mas “que el Cau Ferrat se reúne cerca del mar…que huyendo del ruido de la ciudad venimos a soñar al pie de esta hermosa playa, a sentir nos arrullados por el compás de las olas, a tomar las aguas de la poesía (…) venimos aquí (…) a protegernos bajo la bandera del arte”. Permítanme que proclame una vez más el discurso de Santiago Rusiñol de la Tercera Fiesta Modernista, en este momento inaugural de la exposición El Arte Moderno. Obras Maestras del Cau Ferrat.
Hoy que trabajamos porque el Cau Ferrat, el más genuino y auténtico Museo del Modernismo, se convierta en un museo del siglo XXI sin perder ni un ápice de su carácter artístico único, obra de arte de acoge la colección de colecciones artísticas, auténtico compendio de la modernidad tanto por lo que hace al arte antiguo como por lo que corresponde al arte moderno que vio nacer y propagó, abrimos las puertas de esta exposición porque no queremos que por más tiempo el Cau Ferrat sea un museo de colecciones cerradas.
Las razones que nos han llevado a emprender la organización y producción de la muestra son las de dar respuesta a la demanda social, cultural, artística y turística, así como la voluntad de hacer accesibles las obras maestras que marcaron la hora y la época de la modernidad del Cau Ferrat en el contexto de unos años convulsos y difíciles en los cuales Santiago Rusiñol enarboló la bandera de la regeneración por la vía del arte.
El Cau Ferrat está ahora cerrado por obras pero es un museo vivo y vivas están sus colecciones que aloja. La cuidadosa selección de las ciento cincuenta obras que configuran El Arte Moderno. Obras Maestras del Cau Ferrat obedece a la voluntad de muestra una contemplación y lectura diferente y singularizada de la parte más emblemática de las colecciones rusiñolianas con la voluntad de hacerla accesible y de acercarla a todo tipo de públicos. La tecnología de la información que hemos aplicado, muestra y preludio de la que aplicaremos al Cau Ferrat, nos apunta una de las posibilidades del proyecto museográfico del futuro Cau Ferrat: una joya de la modernidad del siglo XIX plenamente viva y vigente en el siglo XXI.
El planteamiento de esta muestra que hemos titulado El Arte Moderno. Obras Maestras del Cau Ferrat es a la misma vez la de dar respuesta a las demandas actuales de acceso y los ensayos de prefiguración del que será el Cau cuando reabra sus puertas. La introducción a la personalidad de Rusiñol, la consideración del coleccionismo como una manifestación de la modernidad artística de la época en que el artista con voluntad enciclopédica, atesoraba las muestras del arte antiguo y después moderno para su revalorización y ejemplificación estética y a la generosidad con la Villa de Sitges, por el amor que le profesaba, de dejarle en legado la gran obra de su vida son activos que debemos evocar, hemos de valorar y hemos de proyectar hacía el futuro. Tenemos el deber moral y cívico, y esta es nuestra misión.
Desde el Consorci del Patrimoni de Sitges, organismo formado por la Diputación de Barcelona y el Ayuntamiento de Sitges con la finalidad de velar y potenciar nuestros museos, queremos dejar constancia de nuestro compromiso con las artes, con Rusiñól y con el legado que nos dejó, en reconocimiento de los valores artísticos y patrimoniales que en el presente encarna y proyectarlos hacía el futuro en las diversas vertientes de las tareas de los museos de Sitges.
Quiero agradecer al MNAC su colaboración, en tanto que el Cau Ferra tés una sección, sin la cual esta muestra no habría sido posible. Agradezco al comisario de la exposición, el historiador de arte y experto en historia del coleccionismo Ignasi Domènech, su trabajo riguroso y constante, y al personal del Consorci del Patrimoni de Sitges el trabajo que llevan a cabo, y, especialmente a las personas que en los últimos diez días se han volcado literalmente en cuerpo y alma a dar forma definitiva a esta muestra.
El hecho que el presidente de la Diputación, el Alcalde de Sitges y las autoridades que nos acompañan hayan querido estar presentes en esta inauguración no es meramente protocolaria, sino que se trata de una muestra de hasta qué punto comparten la creencia de la importancia de las artes y de la cultura y de sus valores, especialmente en tiempos de crisis. Desde los museos de Sitges estamos seguros que contamos con el soporte material e inmaterial por medio del Consorci del Patrimoni de Sitges en tanto órgano de gobierno y de gestión.
Para concluir mi parte del discurso inaugural, quisiera dirigirme explícitamente a Santiago Rusiñol por medio de su biznieto, Norman Cinnamond. Tu sabes que los que somos y sentimos Sitges estamos aún en deuda con tu abuelo, y que, si hablamos en términos materiales, nunca haremos suficiente para agradecerle que nos situara en primera línea de la modernidad, que nos pusiera en el mapa de la cultura europea y universal de su tiempo y del nuestro y que nos legará su Cau Ferrat con todo el sistema de valores que ello implica. Pero lo que si te puedo asegurar es que ponemos todos nuestros medios, tangibles e intangibles, para situar el Cau Ferrat en la primera línea de los museos únicos del mundo, para corresponder a la generosidad de un artista que creía en un principio que compartimos: que el arte es regeneración, luz verdadera, algo que nos hacer gozar y sufrir y poesía para la vida. Un sistema de valores en el que creemos y que no tiene fecha de caducidad, y es por eso que en pleno siglo XXI mantiene su plena vigencia.
Vinyet Panyella
Directora – Gerente del Consorci del Patrimoni de Sitges.
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